MAREA es una investigación y producción visual desde la fotografía, que se propone como objetivo interpretar y construir ― a modo de archivo visual ― nuestra relación física y sensible con el borde costero.
En este territorio parece ser una reflexión poco común la que hace Patricio Guzmán cuando dice “Los indígenas de la Patagonia fueron el primer y el único pueblo marítimo de Chile. Nosotros, los chilenos de hoy, hemos perdido esa intimidad con el mar.”1 Quizás también Sagredo problematiza nuestra relación con el borde costero y el mar al decir: “Reflejo de la persistencia de la fuerza de la inmovilidad que se atribuye a los Andes como metáfora a lo chileno es la inexistencia del mar como paisaje. La naturaleza en perpetuo movimiento que es el mar, siempre transformándose gracias al viento, la luz y otros elementos, no figura como parte de nuestra identidad, de las representaciones de lo nacional.”2
¿Hasta qué punto la ausencia a la cual refiere Rafael Sagredo y Patricio Guzmán nos puede estar afectando como sociedad chilena?
Fundados en esta interrogante surge MAREA y, desde el constante cambio inasible entre pleamar y bajamar se plantea el inicio de una exploración entre lo formal y lo sensible, entre lo inamovible y lo cambiante, entre nuestro presente y nuestro pasado, entre nuestra comunión con los pueblos originarios y nuestro presente/futuro como sociedad chilena.
1 “El Botón de Nácar”, Patricio Guzmán (Francia, 2015), min. 19’:25’
2 Rafael Sagredo Baeza en Una geografía imaginada, diez ensayos sobre arte y naturaleza, Amari Peliowski y Catalina Valdés (eds.), Metales Pesados, Santiago, 2014, p.21
MAREA es una investigación y producción visual desde la fotografía analógica, que se propone como objetivo interpretar y construir ― a modo de archivo visual ― nuestra relación sensorial con el borde costero, ese que está en constante movimiento y nos interroga sobre nuestra relación con las fuerzas de la naturaleza. Específicamente, se propone registrar nuestra geografía cambiante e inconclusa a través de la relación contemplativa, temporal y la experiencia sensible; a partir de ese registro busca construir una interpretación de nuestra relación con el mar, como si se tratase de un archivo visual o documental de la costa desde el océano cálido y arenoso del norte, hasta el frío, rico y tumultuoso mar del sur del mundo; y, por último, busca generar una propuesta expositiva, impresa y de difusión de la construcción documental del proyecto que nos permita interrogarnos sobre el pasado, el presente y el futuro de nuestra sociedad, sus puntos ciegos, sus borraduras, y sus proyecciones en un contexto de inestabilidad medioambiental, cultural y social.
MAREA es un proyecto relacional y situacional, en el que el proceso está marcado por el diálogo con el paisaje, la geografía y el territorio, metodología que será parte de cada una de las etapas del proyecto, en particular con el desarrollo del fotolibro, la exposición y la relación con el público. Sin embargo, es durante el viaje y el registro fotográfico en que este binomio relacional y situacional toma importancia dentro del proceso creativo de experimentación, conceptualización teórica y práctica. El uso de la cámara gran formato 4x5 surge como un elemento clave y transformador en la aproximación al paisaje, la geografía y al territorio. Esta cámara solo permite hacer una sola foto en aproximadamente 5 minutos, esto obliga a conectarse y a entender los lugares a través de la observación antes de disparar solo por una vez. Es un trabajo meditativo que exige absoluta concentración, persistencia y paciencia, son momentos que no existe nada más que un flujo entre lo que se observa y lo que nos atrae, el punctum del cual habla Roland Barthes en su libro “La Cámara Lúcida”.
El proyecto MAREA es un viaje de descubrimiento que, desde la investigación in situ hasta los conversatorios, nos invita a interpretar el movimiento del agua, del devenir, del tiempo, para imaginar un Chile del futuro, en el que desde el mar alcancemos nuestro propio horizonte de esa “promesa del futuro esplendor”.